Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

jueves, 26 de noviembre de 2015

De la teoría del valor socialmente necesario

Antes de entrar en el tema debo aclarar que no estoy muy familiarizado con El Capital, del que leí el primer tomo apenas, y el principio del segundo, por lo que la idea siguiente puede ser equívoca.

Si no entendí mal y recuerdo bien, Marx, cuando describió la creación del valor de cambio industrial, sostuvo que el valor de cambio de las mercancías de esa rama económica se define en general por el valor socialmente necesario para producirlas, o sea, por la combinación del capital constante y del capital variable en la productividad fabril. Como criterio general, tiene algo de validez ese planteo, pero no es totalmente histórico, por lo que mantiene ignorados a los otros determinantes del valor de cambio, sea industrial o no, como lo es la relación entre la oferta y la demanda en la compra y la venta de las mercancías, lo que postula la escuela liberal. Esa relación entre la oferta y la demanda en la determinación del precio, que es el valor de cambio mercantil, ya que el valor de cambio mercantil es el valor monetario por el cual se intercambian las mercancías, es real y es parte del proceso de producción económica. Lo que pasa es que la ley de la oferta y la demanda es incompleta: describe al intercambio de mercancías sin reconocer a los demás factores que intervienen en el asunto, como la presión sindical, las conquistas legales, la solidaridad humana, las trampas, los manejos sobre la desesperación ajena, las luchas de los consumidores, las pérdidas de stock por robos, la compensación de los perjuicios por sabotajes, las patologías e intereses extraeconómicos de los empresarios, obreros, sindicalistas y funcionarios estatales y tantos más.

La creación del valor de cambio, en tanto que es histórica, responde a los factores a los que responde según lo que la humanidad hace de ella de hecho, pero con la generalidad del valor socialmente necesario, que no aplica siempre de la misma manera ni en los mismos lugares: es histórica también. Esto permite comprender el aumento en el valor de cambio hecho por los empresarios, que con su tarea se lo agregan al precio de las mercancías, lo que tiene una importancia proporcional menor en las grandes empresas, y que es mayor, o total, en las empresas medianas y pequeñas. También permite reconocer la incidencia de las guerras y las catástrofes en la determinación de los precios.

Este es el caso de los vendedores ambulantes, que son empresarios de empresas unipersonales, y que compran mercadería a la que le añaden la cantidad de valor de cambio que necesitan para vivir, o un poco más, o menos, según lo que vendan. Este es un tipo de los tantos casos que hay en la producción mercantil.

Eso de que el precio es distinto del valor de cambio no es verdad: es una idea equivocada de Marx, que se centró exclusivamente en la producción al interior de las fábricas, y sin reconocer las tareas de los empresarios, decir lo cual no quita reconocer la opresión empresarial ni la necesidad de socializar los medios de producción.