Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

miércoles, 12 de octubre de 2022

El 12 de octubre como día del descubrimiento de América

 Ese día de 1492 d.J., los españoles pisaron un continente que tuvo varios nombres previos, sin que se conozca a uno que lo unifique a todo, al que tal vez hayan definido los primeros pobladores de Tierra del Fuego, que llegaron de clanes cuyos antepasados próximos la cruzaron entera hace como 14.800 años (es decir, que desde entonces esa parte de la humanidad pudo saber de un continente completo, aunque no del todo), al que mucho después se llamaría "América", no fue bien aclarado si por Américo Vespucio o por una toponimia nicaragüense. El de 1492 fue un descubrimiento para los europeos antes que para las africanas, oceánicas y asiáticas, que quizás pensaran en que hubiera un continente detrás del Atlántico, o del Pacífico, el primero cuyo nombre más reconocido no es toponímico en una de sus acepciones, sino que homenajea a un ser humano, lo que no ocurre con los otros. Los europeos que llegaron a América pueden haber tenido antepasados prehumanos que la poblaran, que hace cientos de miles de años, cuando ya se habían separado los continentes, se concentraran cerca del monte Kilimanjaro, pero no sabían que existiera, ni que algunos de sus antecesores, de especies que generaran a la humanidad, pudieran haberla transitado, como mónidos chicos, o roedores, a no ser por ideas alucinógenas, que las hay en muchas si no en todas. Tampoco sabían que, como la primer oleada de Siberia a Alaska puede tener como 40 mil años, es probable que americanos de ese entonces, a como hasta 40 mil años de ahora, repoblaran Asia después de pisar América, y que de ahí sus descendientes próximos se reseminaran en Europa, África y Oceanía. Habría que estudiar, en la época de la Pangea, qué especies antepasadas nuestras hubo, si nuestros primeros antecesores no empezaron a existir luego. Como día de la diversidad no es suficiente para la justicia que hace falta (aunque vale como proyecto y tiene sus logros), y como de la raza tiene al ideal mal definido, por el supremacismo blanco, en primer lugar, y por los subordinados, que existen y deben ser corregidos, en segundo, que no distinguen a las razas de forma igualitaria, y cuando se las iguala se lo hace algo en falso, que es lo que prima a pesar de la legislación internacional porque en la práctica las razas existen en desigualdad, no como conjuntos puros ni del todo cerrados ni homogéneos, sino variados, abiertos y en mutación, y con antepasados de colores distintos, en parte según dónde hayan vivido: el racismo de abajo padece infrarracismo, la categorización de la propia raza como inferior (que en malas ocasiones se subleva como supremacismo alternativo), lo que fue impuesto con tecnología militar, la cual se inició como metalúrgica en Egipto, o tuvo un gran hito ahí, donde la piel humana no tiende a ser negra, sino amarronada, pero queda en África y su pueblo provino de clanes negros al sur suyo, antes de sus regresos migratorios. Mucho antes de Egipto, las tribus del este siberiano llegaron cerca de Alaska, y luego la hallaron, pero, como fueron de escribir poco, no habrían dejado registro impreso, no obstante hay una narración artística, de la que se manejan restos recientes, lejanos a los 40 mil años. De lo más viejo que se encontró, hay puntas de lanza, de la supuesta segunda oleada, y con algo se identificó a la que quizás haya sido la primera, creaciones humanas aptas para la prueba de carbono 14, como los huesos y el pelo. Los primeros registros escritos con piedra, o metal, que fueran reconocidos, son muy recientes respecto a la última oleada migratoria de Siberia a Alaska: de 5500 años de la escritura de Uruk, desplazada desde Egipto, a como 13 mil, o sea, que ni la primera, si ocurrió, ni la posible segunda ola migratoria de Asia a América, nos dejaron inscripciones de piedra de más de 5500 años a las que hayamos encontrado, y pueden haber habido retornos migratorios, que hicieran que, en ese tiempo, los hombres de Siberia supieran de América (aunque no con esos nombres), lo que se habría terminado al acabarse la glaciación, hasta que se le llegara en barco. Durante la etapa del primer paso de Siberia a Alaska se habrían conocido los hombres de ambos continentes, para olvidarse después por el deshielo, que licuó el paso, haciendo que fuera difícil, sino imposible, el transporte entre esos continentes, hasta que se hicieron barcos de la talla necesaria para llegarle al segundo, que volvieron de ahí para Europa desde los vikingos y Colón, cuando se reabrió el cruce en barco también por Asia, lo que puede haber tenido un antecedente paleo o mesolítico, para despejar lo cual hay que conocer la historia de la navegación primitiva. De la primer migración humana que habría llegado a Alaska hasta la segunda de la era primitiva, hace entre 11 y 40 mil años, hubo mucho tiempo en que en Asia se puede haber hablado de Alaska, en idioma humano, si es que hubiera habido un contraflujo migrante que llevara la noticia de que había tierra y seres humanos cruzando el paso de Beringia, pero eso se habría dado mucho antes de que se inventara la escritura que más aceptamos como tal, la de Uruk, de 5500 años, en un período de decenas de miles de años, o por lo menos de cerca de mil, entre el principio de la oleada de Clovis y su cierre por el deshielo del puente de Beringia, hace como 12 mil años. Los grabados para comunicarse deben haber sido previos, porque la capacidad para inscribir en madera y piedra existió desde antes. A poco de los españoles la conocieron los vikingos, con anterioridad, que le arribaron por el lado de Islandia, pero de eso se supo poco en Europa hasta no hace mucho. El pueblo americano redescubrió al continente ese día de 1492, como se hace siempre mientras que se vive con lo que se conoce, y siguió con crímenes horribles, comparables a los anteriores, pero de mayor escala porque, en total, hubo más hombres en la Tierra a partir de 1492 que antes (además de por la eficacia de las armas de guerra del Renacentismo, que, sin embargo, no mataron tanto como los gérmenes llegados desde Europa, para los cuales la población indígena americana no tuvo buenas defensas inmunitarias por no haberlos padecido antes), lo que hoy es excesivo, al menos por el modelo social, sino también por la magnitud humana, que entonces debiera decrecer a buena conciencia. Primero hay que ver si la humanidad podría mantenerse, o incluso aumentar, de una forma benigna para nuestra naturaleza, y, si no se puede, reducirla con buena razón.