Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

La culpa

La culpa viene del término osco “kulupu”. Lo que pienso al respecto de la culpa es arriesgado porque no tengo la certeza de que sea verdad, pero lo diré igual, habiendo aclarado que es una reflexión que debe ser cotejada.

La culpa, entendida como pena, pesar, remordimiento, angustia, o como acusación o responsabilización, puede que sea un sinónimo de “golpe”, como las trompadas, las piñas, los impactos de las armas de guerra y los golpes psicológicos. Son palabras que tal vez sean relativas: suenan parecido. Los humanos, ante las injusticias, cuando no las sabemos procesar debidamente, podemos tener respuestas de pasividad o agresividad ilegítimas. Las respuestas culpabilizadoras son de las violentas: son respuestas golpistas. Uno de los grandes problemas asociados a eso es que, al ser el capitalismo un sistema falso, que predica una justicia falsa también, ya que se atiene a los cánones eclesiásticos, teológicos y de legalidad propietaria, los seres humanos tenemos una noción de la justicia equivocada: estamos, en general, mal alienados, por lo que la culpabilización, o sea, las distintas variantes de golpismo, priman en la búsqueda pretendida de justicia, pero no la logran.