Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

jueves, 27 de mayo de 2021

En cierto sentido, casi toda la humanidad es burguesa

 Si se considera como burgués a lo fortalecido con la carpintería, la técnica de los burgos germanos medievales, que eran pueblos fortificados de pocas personas, muchos hombres son burgueses, en el sentido de que tienen casas construidas con madera, pero, por un lado, esa es una definición discutible, y por otro hay diferentes formas de vivir en sedentarismo, así como que las viviendas nómades también protegen. Falta definir bien a lo burgués, porque como es un término muy importante para las luchas sociales, se lo tiene que entender bien. Si se define a lo burgués a partir de la escala de las ciudades alemanas del medioevo, gran parte de la humanidad entra en el concepto, porque hoy en día mucha gente vive en ciudades mayores a esas, de villeros a ejecutivos, pero entonces la noción no distingue entre clases económicas, sino geográficas, que tienen cierta ligazón con las económicas porque las casas hacen a las ciudades, pero deja afuera a los estancieros más dueños, quienes viven fuera de las concentraciones urbanas y son de clase alta. Si se entiende por burgués a lo fuerte, es otro tema, pero entonces hasta las plantas son burguesas, porque tienen su fuerza, e incluso lo muerto la tiene. Para referirse a la clase multimillonaria, la de Federico Engels, habría que usar un término más exacto, porque la inexactitud con que se la caracteriza impide algunas conquistas emancipatorias al pervertir los debates, pero, además, habría que identificarla de una forma suficiente, porque, como la revolución es un tema delicado, un error chico en eso, así como en otros tantos temas, la haría fracasar, o le desgraciaría las victorias. Otro tema es el de la admisión de la condición de clase de la militancia de izquierda, que es algo burguesa, y de clase media, sin que se lo haya expresado bien por los prejuicios contra la clase media que hay en la izquierda, incluso menores a los que hay contra la alta. En eso, la izquierda todavía no tiene un clasismo suficiente, algo que le perjudica la vida a la militancia y que dificulta los logros libertarios, porque le impide asumirse de lleno a sí misma y le distorsiona la verbalización de los planteos. A parte de la izquierda el socialismo le conviene por la descapitalización que le traería, lo cual sería una liberación de la sobrealtura social y de las obligaciones sobre muchas propiedades.