No sé si de todas las marcas. Una es que le ponen aditivos que causan mayor dependencia, a los que se les dice "pichicata", y la otra es el sistema de quemado contínuo, que fuerza a consumir los cigarrillos enteros, en vez de apagarlos, sacarles lo quemado y seguir fumándoselos después, lo que reduciría la cantidad consumida y que puede hacerse, aunque se lo haga poco por la efectividad de este sistema. Encima, la campaña antitabaco se centra en advertir a los consumidores del riesgo y el daño sin eliminar estas trampas, con mensajes terroríficos, y en reprenderles después por las consecuencias. Se castiga a consumidores trampeados y no a las empresas tramposas, y no se impiden las trampas.