Una medida que podría servir para limpiar los partidos de la infiltración de la policía secreta, así como para investigarla y enjuiciarla, es la de formar un colectivo interpartidario dedicado al tema en particular. Entender bien la operatoria de los servicios es clave para descifrar qué políticas autodestructivas impulsaron, cómo afectaron a sus presas y qué acciones reparadoras tomar.
Este grupo no debiera acotarse a los partidos de izquierda, sino que debiera contener a los de derecha si hubieran sido infiltrados en sus sectores de centro, e igual con las organizaciones de base, y demás afectados que necesitaran asistir, pero se tendría que participar mediante la verificación suficiente de la honestidad de los integrantes, para evitar el sabotaje al que acostumbran los agentes secretos.