Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

miércoles, 31 de julio de 2019

Sobre la relación entre el modelo de desarrollo y la estrategia política

Cuando el progresismo obtiene el gobierno tiene que aplicar una política económica, esto es, un modelo de desarrollo económico, que como es central para la reproducción social afecta a las sociedades en general, teniendo grandes consecuencias a nivel político, por lo que es decisivo para los resultados electorales. Entonces, este modelo debe ser bueno lo suficiente, ya que si acumula fallas a la larga apareja mucho repudio social y derrotas electorales. Por eso es que la izquierda debe abrirse a las críticas que se le hagan respecto de sus políticas, las económicas en particular, pero no sólo ellas, aunque también es verdad que aquéllas pueden no ser del todo ciertas, por lo que cabe analizarlas. Desde la izquierda se debe atender, procesar y responder bien a las críticas sociales que se le viertan, porque eso permitiría corregir las propias medidas mientras que se gobierna, lo que le aumentaría sus fuerzas en vez que restárselas. Este tema es muy sensible en materia de megaemprendimientos, sobre todo porque el capital con el que éstos se asocian es bastante corrupto, en lo que hace al pago de sobornos y al desprecio por la gente común que se les opone, con la apelación a las fuerzas armadas y a la justicia, en lo que se desempeña con pocos escrúpulos. Esta cuestión tiene un condicionamiento religioso, ya que los capitalistas ordenan su práctica de acuerdo a los cánones vigentes, algo en apariencia y algo honestamente, sean éstos teístas, ateos, agnósticos o mixturados, cosa que hace que sea necesario que la religión sea verdadera lo suficiente. Entiendo a la religión como sinónimo de concepción, no necesariamente clerical ni teísta. Asimismo, el clericalismo podría persistir, pero el uso de las iglesias debiera ser socializado y la prédica acertada: podrían ser sitios para las asambleas locales, en que se debatirían los asuntos comunes, pero habría que ver cómo sortear el problema de su forma arquitectónica, que fuera dispuesta para relaciones verticales.