Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

lunes, 18 de enero de 2021

De la grilla para clasificar la realidad

 Hay un parámetro biológico que distingue en niveles. Primero está el dominio, donde entra todo lo que vive. Después, el reino, sea animal o vegetal, con algunas subcategorías complementarias. Tercero está el filo, también llamado división, un conjunto de subcategorías del reino. Cuarto, y siempre en ramificaciones que provienen de la catalogación previa, la clase, quinto el orden, sexto la familia, séptimo el género y por último la especie. Con este cuadro se puede clasificar cualquier cosa viva, pero tiene algunos errores, como que está mal su etimología. En vez que organizarse según categorías numeradas, se lo hace con palabras cuya etimología no remite siempre a los objetos designados por ellas. También hay un error en su historia, ya que el reino, la segunda categoría, antes incluía a lo mineral, que es inerte. Se debiera hacer la taxonomía según el orden que conozcamos. Primero, lo inerte, de lo que sale lo vivo, en varios subtipos, luego subramificados en varias formas. Así la grilla contendría a todo lo conocido, e igual habría que rehacerla cuando se descubrieran cosas nuevas que lo ameritaran. Mejor que enumerar sería catalogar con palabras verdaderas, pero su nivel de abstracción es tan alto que no es fácil de hacer. Además, quedan problemas pendientes, como el de si el reino animal es uno diferente o un subtipo del vegetal. Cf. "taxonomía" en Wikipedia. Otro tema es el de si lo vivo no es un subtipo de lo inerte. Existiría lo inerte, como materia menos compleja que la orgánica, hasta el inicio de la vida, a partir de lo cual dentro de lo inerte estaría lo vivo. Lo inerte no es desordenado. Tiene su orden. Lo génico sería algo inerte, aunque también tiene su orden, y uno mayor que el de la materia menos compleja que los genes, desde las proteínas hasta las partículas subatómicas, pero entonces habría que ver cómo decirlo, porque si inerte significa "no ordenado", la palabra no va bien con su significado. En Etimologías de Chile dice como que "inerte" es "desarmado", es decir, que el uso del término es incorrecto, porque lo muerto tiene su estructura molecular. Sin embargo, lo inerte y lo vivo son subgrupos distintos. Está la materia que antecede a la vida y la materia viva, que se compone de la que la antecede y que vuelve a ser de ella al morirse. Lo muerto se desarma al biodegradarse, sin llegar a deshacerse del todo. Lo llamado inerte es materia inferior a la génica, es decir, lo inorgánico, si usamos a este término en el sentido de lo que no tiene genes. Lo orgánico tiene genes, pero también es inorgánico, porque los genes se componen de sustancias menores que ellos, es decir, que son inorgánicos tanto como orgánicos. Es de una materia inorgánica dipuesta de modo tal que se nutre, crece y demás. Todo es algo, y parte de ese algo vive. Lo que vive es génico, y al morir se descompone hasta el nivel inferior al de gen. A su vez, lo inorgánico, desde su inicio conocido, el del big bang, hasta el surgimiento de la vida, no tuvo ninguna relación con lo orgánico, porque no había nada vivo con lo que relacionarse, pero a partir de comenzar la vida se volvió orgánico, pero no en el sentido de poseer genes sino en el de relacionarse con ellos sin tenerlos, en una relación involuntaria, de causas inerciales.

 Las proteínas en general están muertas, pero hay una, la más compleja, que quizás viva. No me acuerdo más del tema. Es una proteína muy parecida al ácido nucleico, pero sin los redondeles tubulares en el centro. Capaz que no viva. Si se empieza a vivir al comenzarse a beber, hay que ver cómo actúa, lo mismo que pasa con los mal llamados viruses, pero vivir también implica respirar y absorver sólidos, lo mismo que expulsar residuos, o algo muy parecido a eso, además del crecimiento, el relacionarse, la reproducción y la muerte. La reproducción es una condición aleatoria de lo viviente, ya que no todos los seres vivos tienen hijos.

 Puede pasar que el reino animal, si bien provenga del vegetal, sea uno distinto de éste, como lo vivo de lo muerto, pero también puede que lo animal no provenga de lo vegetal, que es lo más aceptado hoy en día por la humanidad.