Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

lunes, 4 de enero de 2021

Embarazo, embrión y hembra

 Es curioso que la etimología no vincule el embarazo al embrión, siendo ambos cosas tan próximas, y sus palabras tan parecidas, así como con lo femenino, que tiene óvulos que al fecundarse se convierten en embriones, tanto como embarazos. Lo masculino es espermático, y siempre de embarazo externo. Las hembras se caracterizan por tener a veces al embrión adentro suyo, luego de fecundarse, en ocasiones hasta el parto, que es cuando se rompe la bolsa embrionaria, sea dentro o fuera de la madre, como pasa con los huevos de cáscara. El nacimiento, al que se confunde con el parto, en verdad es la fecundación, que es cuando se inicia el ser vivo, a partir de la unión de sus genes, que antes están separados. Hay hembras que, si bien ovulan, no fecundan dentro suyo. Son de fecundación externa, para lo cual expulsan al óvulo fuera de sí, como las ranas y muchas peces. Las reptiles, ya más salidas del agua, tienen la fecundación adentro. Son de fecundación subjetiva, es decir, intracorporal. Sin embargo, no es seguro que haya una relación etimológica entre estas cosas. Para saberlo hay que indagarlo bien.