Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

martes, 4 de febrero de 2020

Sobre el manejo de las percepciones

La manipulación informativa se maneja con el moldeo de la percepción de la realidad de la gente, se induce a la gente a pensar de determinada manera con la presentación de una versión ficticia de la realidad política, pero la manipulación puede ser buena. Es más, la manipulación es necesaria para la estrategia revolucionaria, pero entonces tiene que ser honesta. ¿Cómo sería una manipulación honesta? La manipulación es el manejo pulidor, hecho con las manos, del que luego se sacó la idea de la obra que le da forma a un objeto, cosa que no siempre es mala. Un manejo ideológico bueno tendría que ser abierto, es decir, que tendría que advertir lo suficiente del problema ideativo vigente a la gente a la cual se interpelaría, para que evalúe sus ideas y proponga sus buenas razones, y avisar que se intenta cometer una maniobra discursiva para atender el problema señalado. Como la manipulación se basa en las percepciones, una manipulación justa tendría que promover que las percepciones sociales sean más verdaderas. Las percepciones son lo recibido del mundo externo y lo corporal del interno, incluso con los sentimientos, que son cosas concretas, hechas de materia. Lo percibido es lo cabido en alguien, pero parte de lo que cabe en la vida de alguien es creación de sí mismo, por lo que no es algo netamente pasivo y, como atañe a los pensamientos, que se hacen de materia externa, son importantes para la planificación de las tareas y para la crítica sobre las cosas de la historia. Hacen al modo de entender el mundo, por lo que definen la política de los miembros de la sociedad. Para que la sociedad revalúe sus ideas es preciso que sepa que está equivocada en algunas cosas.