Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

viernes, 22 de diciembre de 2017

El capitalismo es el modo de acumulación del fideísmo moderno

La humanidad, al menos desde su asentamiento en las ciudades y el agro, es fideísta. Ya desde antes venía manejándose algo según las creencias, pero desde el estatismo agrícola éstas adoptaron la modalidad sedentaria, que implicó el traspaso desde la deificación primitiva al politeísmo mitológico, y luego al monoteísmo, proceso durante el cual la divinización pasó de esclavista a feudal, antes de serlo capitalista. La modernidad, vista a largo plazo, implicó la remodelación del fideísmo, que pasó de feudal a capitalista porque el orden social se sofisticó mediante la ciencia del idealismo objetivo, que se empezó a gestar desde antes de que Hegel la sintetizara, permitiendo la fabricación de capitales más abstractos que las monedas y las joyas, a la vez que la complejización de la industria, que adoptó al salariazgo porque se hubieron impreso los billetes.

La acumulación es la formación de cúmulos, de montones de cosas puestas juntas por medio de la práctica. La capitalista abarca a todas las propiedades humanas y la dispone con el interés de la valorización abstracta, que es fideísta. El fideísmo es sinónimo del fetichismo, pero tiene un sentido más primigenio, ya que el fetichismo tiene connotaciones de la ritualidad primitiva, el animismo, al que se supone superado por la fe moderna, pero que persiste en el sistema social actual. El fideísmo, como acto de fe, precede al fetichismo, que supuso, además de a la fe, a la divinización de la naturaleza, con ritos, o sea, con procedimientos féicos más desarrollados que la creencia simple, ya con relatos largos sobre los elementos naturales, como los ríos, las estrellas, los animales y las plantas. El fetichismo implica la asignación de propiedades mágicas a las cosas, lo que quiere decir que le antecede el método ideativo creyente, el que se explica la realidad según los pareceres. La creencia permitió al fetichismo, y éste le cedió paso a la mitología, de carácter politeísta, lo que luego fue reformulado, a lo largo de alrededor de 20 siglos, en términos monoteístas, lapso en el cual el politeísmo y el ateísmo permanecieron marginados, a izquierda y a derecha del liberalismo, e incluso así hay rasgos superiores al monoteísmo capitalista en el politeísmo, como el del cuidado de la naturaleza del animismo primitivo, porque el progreso liberal es algo falso, y en particular en lo que hace a la ecología. Al surgir el liberalismo, como síntesis filosófica monoteísta, fue revolucionario, pero ahora es de derecha, con una variante alternativa centrista, que es la del capitalismo proteccionista.