Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

sábado, 4 de julio de 2020

Sobre la simpatía jurídica

Las y los jueces comparten un ideario común, que es heterogéneo y evolutivo pero tiene cierta coherencia, que se estructura según la moral predominante en la sociedad, en particular la adoptada por la ley suprema, reversionada en las elecciones periódicas, que dependiera de la ciencia de quienes la erigieron en asambleas constituyentes, por lo que de su religión, ya que la religión, sea la que sea, contiene un discernimiento sobre la realidad y el deber ser. En ello hay cierta simpatía de clase, una simpatía relativa y moderada por preceptos partidarios de la ecuanimidad pero que influye en las sentencias, sobre todo en los momentos turbios, cuando los elementos decisorios son insuficientes y se tiene que expedir, y que tampoco es sólo de clase porque también es clerical, de género, etárea y demás. Los jueces no son grandes empresarios, pero los mejor pagos tienen con ellos cierta afinidad de clase, mayor que la de quienes cobran menos y que también responde a sus lazos familiares principales, los establecidos en la ley institucional, a la vez que a las relaciones de amistad, militancia y trabajo que entablaran durante sus vidas.