Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

lunes, 21 de marzo de 2016

Instrucciones para lavar la ropa a mano

Usar jabón común, en lo posible de fabricación cercana. Los jabones refinados pueden dañar la piel con el tiempo. El jabón común quizás también, pero es menos probable. Para saber mejor hay que hablar con lavadoras viejas. El jabón fabricado lejos suele ser del capital trasnacional y sale más caro por el costo del transporte, lo mismo que vale para los envoltorios.

El lavado tiene cuatro etapas:

- La primera es la del enjabonado de las prendas. Hay que ponerlas en un recipiente, como lavatorio, balde o palangana, con agua, y entonces mojar el jabón y diluirlo frotándolo con las manos y sumergiéndolo. Luego, se deja reposar a la ropa mojada un rato, que puede ser de 20 minutos a 48 horas, aunque esto último no es recomendable; mejor es un lapso de entre 2 y 24 horas. Usar agua preferentemente fría, para ahorrar gas, salvo que haga mucho frío. El agua tibia ayuda a remover la suciedad. Otro modo es el de dejar al jabón en el agua durante un rato, más o menos largo según la cantidad que se quiera licuar, y luego frotarlo.

- La segunda es la del fregado. Hay que encontrar las manchas, puntuales o difusas, y refregarlas una por una. A veces sirve enjabonarlas de nuevo.

- La tercera es la del revolvido. Se agarran las prendas todas juntas y se las remueve unas 300 veces dentro del recipiente, de una vez o por etapas. Luego se tira el agua sucia y se aprieta un poco la ropa para escurrirla.

- La última es la del enjuage. Se carga con agua el recipiente, se hace una primera tanda de 100 removidas, se tira el agua y se vuelve a escurrir, y luego otra vez más.

Se puede variar el procedimiento según esté más o menos sucia la ropa. Estas instrucciones son una base estándard, a la que se puede mejorar con la experiencia. La postura corporal debe ser erguida, con las rodillas levemente flexionadas, al igual que la columna vertebral.

También está el uso de lavandina, del que se puede preguntar, y las revueltas sentado, en silla o en el suelo, donde conviene arrodillarse.

Insisto en que a estas instrucciones hay que cotejarlas en la práctica y hablando con la gente mayor.