Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

martes, 24 de octubre de 2017

Del mito de la tasa de interés y el abuso al empresariado

Al haber la idea de que el empresariado tiene que contribuir al desarrollo social mediante el engrandecimiento de la economía por la vía de la reinversión de las ganancias, se le adjudica a los empresarios la responsabilidad de crear los puestos de trabajo, responsabilidad que a veces ellos asumieron, pero que es claramente falible. Pensemos en un empresario capitalista que tiene una empresa. Ya con una, así fuera pequeña, y más si lo es mediana, y ni que hablar si grande, aunque estas últimas no suelan tener un sólo dueño, sino un conjunto de socios accionistas, tiene bastante de qué ocuparse, además de sus otras responsabilidades, como las familiares. Por ende, una persona así, bastante sobreatareada, no va a querer fundar más empresas, o ampliar la que ya tiene, por lo menos sin reticencias, porque eso le aparejaría tener que asumir más obligaciones, que además están muy controladas por la ley y que son poco gratas por el desprecio de los subordinados. Entonces, a las ganancias se las volcó a la especulación y a la fuga, que no requieren de tantos disgustos. La idea de que bajando la tasa de interés los capitales empresariales se volcarían a la inversión laborista supone que los empresarios son seres abstractos a los que lo único que les interesa es la acumulación de dinero, por lo que el éxito de la política económica que se basa en ella es relativo, aparte de abusivo. Además, atender al desempleo mediante este procedimiento no resuelve a otros de los problemas de fondo, por lo que es insuficiente incluso si se logra lo que se propuso.