Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

domingo, 21 de marzo de 2021

Comentario corto sobre Borges y el peronismo

 El peronismo lo acusó a Borges de "gorila", refiriéndose a que fuera antiperonista, pero Borges fue un antiperonista moderado. Dijo que el peronismo no era ni malo ni bueno, sino incorregible, algo desacertado, porque no se entiende bien qué quizo decir con eso, pero al decirlo expresó una crítica pacífica, a lo que antes hubo tratado de monstruo, también de manera poética, y después criticó a la dictadura militar que persiguió y desapareció a una parte suya. Al final de su vida se declaró anarquista, o sea, que a lo sumo fue un antiperonista de ultraizquierda. Jorge Luis Borges fue un burgués de barrio alto. Vivió en pleno Retiro, en un departamento lujoso al que tuvo un poco derruido, donde hubo una placa de bronce con su nombre, atrás del palacio del ejército frente a la plaza San Martín, pero no fue dueño de una gran empresa, ni reaccionario, sino un gran literato mundial, oscilante entre una derecha y una ultraizquierda raras, quien tuvo sus dificultades para acertar el juicio, lo cual es normal y se nota en algunas de sus entrevistas, en las que respondió a preguntas políticas con juegos de palabras alegres pero evasivos, es decir, que entonces no planteó una crítica cierta, sino de festividad poco seria para el tema, de ludismo ficticio, sin que la sociedad pudiera disfrutar bien de los beneficios del orden, lo que persiste hoy en día. Sin embargo, le dio placer a su sociedad. Fue un gran escritor argentino, de los mejores de la historia humana. Tampoco podía brillar en materia política tanto como lo hiciera en literatura. Es mucho pretender, que él fuese tan buen político como escritor de ficciones. Su literatura tiene esa ambivalencia, porque es tan grande como los problemas que la sociedad tiene que resolver, luego de su muerte, para vivir como se debe. Creo que lo mejor que se puede hacer para su recuerdo es cambiar al mundo lo que hace falta para que la humanidad viva tan bien como fueron de buenos sus escritos, tampoco del todo buenos, porque sus errores políticos se notan en la obra, pero esos errores no estuvieron del todo desprovistos de cierta legitimidad. Respecto al peronismo, no sólo él lo defenestró, sino que también fue a la inversa, y en parte porque se siguieron críticas falsas, de lo que se pelearon con alguna ignorancia, que se mantuvo hasta la última dictadura, a la que Borges primero festejó y después recusó sin tanta fuerza, pero sí mencionando que hubo 30 mil asesinados, muchos de los cuales fueron peronistas. Hizo una obra literaria de una calidad difícil de medir, de tanta que es, en una sociedad que padece una crisis mundial severa a consecuencia del fingimiento, pero este fingimiento en poco responde a su obra. Creo que él hizo una ficción muy celebrable, aunque con faltas políticas graves, en un contexto de gran crecimiento y crisis del mundo humano. Quizás el problema sea que fue demasiado grande, así como es demasiado grande la acumulación de las propiedades de los barrios ricos, pero eso fue culpa suya en poco, porque lo individual es social y existe coercionado, por ejércitos y militancias menos armadas.