Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

viernes, 9 de junio de 2017

Demostrar debilidad

En política hay muchas estupideces, una de las cuales es la de negarle entidad a los adversarios parecidos a uno, que, como las distintas partes la reproducen, las organizaciones progresistas terminan desfavoreciéndose entre sí, al menospreciarse recíprocamente, pero quiero hablar de otra taradez, que es la de impostar fortaleza cuando no se la tiene, por el mal prejuicio contrario a demostrar la propia flaqueza. Cuando una fuerza es débil, cabe que lo dé a conocer, salvo excepciones, a no ser que se escondan malos propósitos, u otra cosa, porque eso convoca a la solidaridad ajena y le permite entender la situación a los que ignoran las cuestiones en curso, los representados, que si no la entienden concluyen pretendiendo que la organización les satisfaga reclamos que ésta no está en condiciones de hacer cumplir. Los representados tienen que conocer la correlación de fuerzas que influye en el atendimiento de sus demandas, porque participan en la transformación de esa correlación y porque tienen que adecuar sus pretensiones a las circunstancias para que el democratismo progresivo se mantenga en el gobierno, aunque sea subordinadamente, si es que no puede imponerse más.