Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

jueves, 18 de octubre de 2018

El socialismo como remedio para la mayor sociopatía económica y política de la humanidad

El socialismo científico se inspiró en la idea moderna del progreso humano, que en las ciencias médicas adoptó el objetivo de curar las enfermedades, por lo que su propuesta es la de una transformación social que resuelva el grueso de los padecimientos económicos y políticos del capitalismo, diagnosticados en la crítica socialista. Esto es una sociatría, o sea, un tratamiento para remediar los males sociales, que depende por un lado de que el diagnóstico sea verdadero y completo, pero por otro de que la sociedad sea conciente del asunto, y acepte y ejecute bien las instrucciones a seguir, lo que no es fácil y requerirá de medidas transitorias. El buen diagnóstico de la realidad social es necesario para que la estrategia socialista pueda desempeñarse coordinadamente por el conjunto de las organizaciones socialistas, que debieran intentar primar en frentes progresivos, cosa que depende del voto social, que debe ser proletario en cerca del 80% del total de la población; o, si no, favorecerlos desde afuera. La promoción crítica del progresismo religioso permitiría, por un lado, mantener las condiciones de vida proletarias en un nivel no descendiente, lo que le serviría a los partidos socialistas para atraer simpatía popular, y por otro enseñarle a las personas, proletarias o no, las bondades del socialismo, que debería ser humilde y autocrítico para con sus propias faltas, y más aún cuando gobierne. En democracia polipartidaria, la promoción del progreso liderado por los partidos religiosos y procapitalistas es una fase necesaria en tanto que la mayoría social no aspire al socialismo ni al relacionamiento que no es teísta.

Un lugar destacado merece la cuestión del fratriarcado, que es parte del programa socialista y que es el remedo para la opresión patriarcal, así como le son necesarias la aceptación de la buena diversidad sexual y el buen transgenerismo.