Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

viernes, 10 de febrero de 2017

Una posibilidad de ser anarquista coherentemente

El anarquismo puede ser válido en los términos de una complementariedad democrática entendiéndolo como una postura contraria al estado y a la forma de gobierno vigentes, pero que reconozca su existencia, de lo que se derivaría una política gubernativa crítica, que tendría puntos de apoyo y diferencias con las otras fuerzas proletarias. Al no reconocer al estado ni al gobierno, el anarquismo se tornó insostenible, e insensato, ya que ambos existen por sí mismos, porque por un lado los anarquistas renegaban de las leyes, pero después las cumplían, ya que la sociedad demandó su cumplimiento, algo bien y algo mal, y porque las leyes son algo buenas. Aparte de existir por sí mismos, los estados y gobiernos tienen sus aciertos, y merecen correctivos.


Agregado

Esta nota está mal, porque apela a una acepción del anarquismo que no es usual. Las acepciones aceptadas son antigubernativas, así que los anarquistas seguirán estando en contra de los gobiernos, aunque no siempre. En términos anarquistas, se les dificulta asumir una política gubernativa explícita, lo que le resta fuerza a sus proyectos, o lo hacen mediante la protesta social, pero entonces reconocen al gobierno. Al protestar, en verdad, dejan de ser anarquistas, y es lo que debe ser, porque el gobierno es necesario, aunque quepa transformarlo.