Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

martes, 1 de noviembre de 2016

El sentido imaginario

En tanto que los sentidos son las facultades anímicas mediante las que sentimos, podría ser que la imaginación fuera un sentido, ya que a nuestras fantasías las sentimos. Cuando imaginamos, nos hacemos una idea dentro de nuestra subjetividad, a la que percibimos mentalmente, y, si bien esa idea se corresponde con cosas del mundo exterior, el sentido imaginario no lo percibe directamente, sino que lo recrea en la mente, incluso inventando cosas inexistentes hasta entonces, como las figuras míticas, que son relaboraciones fantasiosas de elementos objetivos. Hay algo que sentimos al pensar, por lo que el pensamiento también es sensitivo, no sólo porque a las ideas las percibamos, sino porque según sean nos inducen a otros sentimientos, como el miedo o la alegría.

Al pensamiento lo sentimos en la cabeza, porque es cerebral.