Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

jueves, 12 de abril de 2018

Cristina Fernández, ¿es capitalista?

Un criterio para evaluar a los gobiernos populares es el de medir la capitalización de sus miembros y compararla con la de los privados, cosa difícil de hacer porque la tenencia de capitales no es hecha pública directamente. No me da para saber si la ex presidenta argentina es o no capitalista, ni menos para recontar su evolución patrimonial, pero eso sería importante para entender bien al populismo. El populismo es la concepción política proclive al pueblo, lo que adoptó distintas formas a lo largo de la historia. Hubo populismos de derecha y de izquierda. Ambos apelaron al pueblo, uno de forma pro-capitalista y otro pro-socialista, pero siempre bajo legalidad privada, de lo que el resultado final fue siempre diestro. El capitalismo del comunismo chino tiene de diferente del capitalismo fidente que se centralizó en el gobierno, antes de aceptar su mixtura con el empresariado liberal, que como está compuesto por seres humanos es respetable y debe poder participar de la interacción humana, a lo que seguirá haciendo en los términos de la acumulación abstracta mientras que considere que eso es lo correcto y se lo faculte la ley. Entonces, al capitalismo habrá que soportarlo hasta que las personas que lo ejercen acepten que deben dejar de reproducirlo, lo que puede adoptar diferentes modos y debiera ser bueno. Esto implicaría la autocrítica suficiente de la clase dominante, que también tiene falsa conciencia, por lo que es denunciable en público.