Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

jueves, 7 de mayo de 2020

De lo elitista del gobierno votado

Una elite es un grupo selecto. "Elite" significa "selección". Viene de "elegir". El tema está influenciado por la idea de que hay un grupo de favoritos de dios, a los que él escoge como sus fieles más adeptos de acuerdo a la obediencia que ellos demuestran respecto a lo que se cree que son sus preceptos, que varían algo de acuerdo a quiénes sean las autoridades máximas de las iglesias predominantes, en general sin que se pierda la esencia del credo. La democracia teísta sigue la idea pastoral, que se combina, en los países en que la fe en dioses es mayoritaria, pudiendo hasta haber sido establecida en la ley de forma explícita, con las elecciones de gobierno. En casi todos los países el gobierno es electo por la sociedad mediante el voto, incluso en los de sistema unipartidario, o sea, que todos los gobiernos son grupos selectos, lo que será un problema al que se deberá resolver bien, para lo cual la sociedad tendrá que reconocer de verdad a la historia. En el comunismo también habría gobierno electo, así que habrá que honrar al elitismo.

La palabra "honra" remite al bien. "Honrar" es "abuenar", como si se dijera "embuenar", vocablos hipotéticos ridículos y muy pesados para pronunciar, que suenan como fofos, por lo que se transformó a la idea de abuenar en la de la honra. La palabra "honor" es una forma fácil de decir "buenor". Entonces, honrar al elitismo singifica hacer que sea bueno, lo que es necesario porque el vigente no lo es como debe serlo para que se supere la crisis, lo que, además, podría ser insuficiente, ya que las revoluciones no son suficientes de por sí, sino que deben adquirir la calidad de la suficiencia para lograr lo que se proponen. Un elitismo bueno tendría que ser bien decidido, lo que requiere que la sociedad tenga la razón suficiente. Sería un sistema bien planteado para la toma de decisiones, con los cargos más rotativos, o menos, según lo que hiciera falta y lo que pudiera hacerse. Tendría que ser relativamente igualitario, mucho menos desigual que el actual.

Si una revolución fracasa su proyecto no se concreta, quedando la sociedad en la miseria, por lo que las revoluciones tienen el deber de ser suficientes, así como la sociedad, ya que de lo que se trata con la evolución histórica es de su vida.

En el derecho liberal la soberanía va de dios al pueblo y del pueblo al gobierno, con el voto mediante, que equivale a la oración del rezo. Es una declaración de fe, un parecer, una intuición y una opinión, que se exclama de acuerdo al credo individual, pero tampoco estaría bien sostener la soberanía en base a una verdad mal impuesta, es decir, que se debe imponer el socialismo por las buenas, dentro de lo cual cabe la crítica del pueblo, en mucho impidiente del socialismo o partidario de socialismos teístas, que no fundan la aplicación de las ideas en la verdad segura, sino en verdades supuestas, lo que causa mucha pena.