Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

domingo, 10 de mayo de 2020

De que la mala información mata

Así como si el código genético es malicioso el ser vivo actúa mal y se muere, a las culturas les pasa lo mismo, que si se informan mal se mueren, pero la muerte de las sociedades suele ser relativa: se muere alguna gente y no otra, y una tercera se enferma, por lo que la especie pervive maltrecha, teniendo que enfrentar los problemas de la vida, para lo cual precisa de buena información, que depende de su credo porque los credos proponen un sentido global de la existencia; responden a las preguntas por el quiénes somos, para qué venimos al mundo, qué debemos ser y demás. Entonces, los credos deben tener la suficiente razón.

La religión aspira a la felicidad humana, pero la felicidad, en sí misma, es el sustantivo filiar -lo que vendría a ser la "filiocidad"-, o sea, que además de darse tiene que darse bien, porque puede haber mala felicidad. Para que la sociedad sea bien feliz su razón debe ser verdadera lo suficiente.

Así como cierta mala información mata, otra no llega a hacerlo pero enferma a la sociedad por equivocar el pensamiento, lo que lleva a cometer malas prácticas.