Entre otras cosas, es para criticarlo bien, porque tiene muchas faltas. Es una obra en proceso, o sea que las notas fueron retocadas, y reiteran varias veces los mismos temas. Para escribirme, hacerlo a juanchaves.baires@gmail.com.

viernes, 15 de mayo de 2020

Sobre el negocio

Con el negocio pasa que su opuesto, el ocio, no está bien definido, por lo que se lo categoriza de acuerdo a una base endeble. Algunas de las acepciones del ocio lo toman como la acción que no es obligatoria, como el acto libre, otras como el dulce hacer nada. En el tiempo ocioso se hace algo, y no está del todo desprovisto de la necesidad, pero, más importante que eso, es que las obligaciones para vivir podrían ser justas lo suficiente, con lo que serían gratas de obedecer. También pasa que la actividad escolar, a la que se estima como ociosa, tiene carácter fabril, es decir, que no es divertida, o relajada, o gustosa como debiera ser.

La inestabilidad de los negocios tiene relación con como se entiende al ocio, ya que la razón social tiene vínculos internos, que hacen que la manera de pensar al ocio influya en el modo que adopta su negación. Entonces, habría que determinarlo tal cual es, pero para legalizarlo en consecuencia la sociedad se tendría que desprender de los prejuicios religiosos erróneos que inciden en la economía.


Fuentes

Entradas de "ocio" y "escuela" en el diccionario castellano de etimología citado antes.